Ulises ya demostró su apetencia por los ganchitos, así que la abuela le ha proporcionado otros de mayor porte que le duran un poco más, aunque sólo un poco más.
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O la grandilocuencia de las insignificancias cotidianas.
1 comentario:
Pero, ¿dónde se ha quedado el bebé que veíamos hasta hace muy poco? ¡qué cambio!
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