2.3.06

Subida al Torrecilla (II)

En el punto final giré la mirada y lo que vi me acojonó sutilmente, pues había caído una densa niebla que no estaba allí cuando llegamos. Por fortuna había bastante gente a la que se podía seguir de cerca, lo que nos permitió encontrar el camino de vuelta (a veces de pie, a veces de lado, a veces sentado).



El camino de vuelta repitió puntualmente todos los hitos anteriores, aunque llegados a la antena encontramos un carril que llegaba hasta donde teníamos el coche, lo que nos ahorró pasar por el trago de bajar por el bosque (bastante mal trago habíamos pasado bajando la pendiente del tramo final de la subida). Desde luego si llegamos a conocer antes el carril le iban a haber dado morcillas al pinsapar, aunque la verdad es que el paraje merecía la pena el esfuerzo.

Al final fueron algo más de siete horas, que concluimos en el merendero del punto de partida haciendo nuestra comida (comida que paseamos convenientemente por toda la montaña, pero que no consumimos pues la necesidad principal era acabar el camino).


El resultado fue un día bastante entretenido, con unas vistas muy buenas, y con unas quemaduras en la cara y en los ojos que me hacen plantearme presentarme al casting de alguna película de zombis (la verdad es que me parecía raro eso de ver círculos flotando sobre la nieve similares a las luces de las películas de ovnis, aunque creo adivinar que eran fruto del deslumbramiento que me ha dejado los ojos inyectados en sangre).

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Ves lo que te pasa por no leer a Laceci