9.10.06

Inventos para el futuro

A partir de los años cincuenta del siglo XX se desbordó la imaginación popular y empezaron a surgir masivamente historias de ciencia ficción, la mayor parte de las cuales miraban hacia el siglo XXI como fecha en la que se desarrollaba la acción.

Por tomar un ejemplo muy evidente ahí tenemos "2001: Una odisea del espacio".

Por supuesto que hay autores (sobre todo en la literatura) que iban más allá, caso de las fundaciones de Asimov (no se cortaba un pelo enviándonos miles de años para adelante) pero una tendencia habitual era imaginar una evolución más rápida de lo que realmente se ha dado.

Sin embargo en la segunda mitad de siglo los avances tecnológicos han sido enormes, mucho más veloces y de mayor impacto que en el resto de la historia de la humanidad. Me pregunto entonces ¿qué nos ha faltado para llegar al nivel que se imaginaban aquellos autores?

Fundamentalmente dos cosas: vencer la fuerza de la gravedad y el teletransporte.

Ambas, además, se antojan lejanas y difílmente realizables. Hay otros inventos que pueden estar más cerca, como la fusión fría (energía ilimitada para todos), pero no supondrían un cambio tan radical en el modo de vida que tenemos ahora mismo. Si hubiera fusión fría no pagaríamos factura de luz, pero seguiríamos utilizando bombillas. O no usaríamos gasolina, pero seguiríamos usando coches. Por supuesto que los medios de producción cambiarían, pero el mundo no sería tan distinto.

Sin embargo si se lograra vencer la fuerza de la gravedad de forma "portátil" (nada de cohetes o de vehículos a reacción) la estructura de las cuidades cambiaría, la colonización espacial sería posible, el mundo daría un vuelco radical.

Algo similar pasaría con el teletransporte, entendido como un medio instantáneo de transporte. El teléfono perdería el sentido, las carreteras, los aviones, los telepizzeros (pobres, todos al paro)...

Claro que seguro que si se inventaran tales ingenios ya se cuidarían las multinacionales de explotarlos a gran escala y no poner la tecnología al alcance de los particulares de forma barata, y es que no hay nada peor para no cambiar que no querer cambiar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Acabo de recordar lo mal que lo pasé en 1983 cuando, leyendo comics me dí cuenta de que el famoso 1984 tendría que cambiar de nombre...
No viene al caso, pero me has creado una cierta angustia, sobre todo al recordar los años que tengo.