16.12.04

Sentido de la vida

Aunque con pocas palabras uno deja las neuronas agotadas cuando se pone a profundizar en los entresijos del sentido de la vida, recordando breve pero intensamente las más delirantes paraoias adolescentes.

Mi profesor de teatro a veces nos preguntaba: "¿Y para qué queréis saber más?", a lo que nosotros que éramos lo más parecido a una performance de inquietudes y hormonas (o sea, mucho efecto pero sin ningún sentido) no podíamos más que llevarnos a la cabeza pensando "¡Qué tipo tan superficial!".

Nada más lejos de la realidad. Fue Eistein quién dijo que la verdad debe tener una explicación simple, las reglas de la naturaleza son armónicas y, por tanto, no se retuercen y enrevesan para ofrecer su orden, sólo hay que descubrir las respuestas correctas.

Y la respuesta correcta es la búsqueda de la felicidad. Lo complicado es saber cómo, pero mi truco para no tener que dar respuestas complicadas es obviar las preguntas, así soy feliz.

2 comentarios:

Stand by dijo...

No me había planteado la teoría del escaqueo como método de supervivencia pero, ahora que lo dices, no está de más ante ciertas personas-preguntas indiscretas..

Elisabeta dijo...

obviar las preguntas y a veces...no preguntar...puede ser un pequeño truco,si...Buenos dias y besitos.