Este fin de semana leí en la revista Quo una de esas frases que hacen meditar: "el sexo es un regulador de la conducta". Entendiendo sexo no como lo que cuelga (o no), sino el uso que se hace de ello.
Lo interesante de la frase es que la regulación de la conducta se aplica tanto a si se hace uso como si no se hace uso, pues en un caso la conducta se regula al amansamiento y en el otro al envilecimiento.
Y aún así está claro que hacen falta matices, pues se podría llegar a la conclusión que el mundo es violento porque se folla poco (bueno, lo cierto es que nunca está de más darle al tema) pero no es tanto la cantidad como la calidad, pues sexo de mala calidad produce frustración, lo que incrementa el envilecimiento.
Si a esto unimos la sentencia ya comentada de que el origen de todos los males está en el amor al dinero se concluye que más que poco se folla mal, pues donde esté una buena moza o un hermoso mancebo (a gusto de cada uno) que se quiten los dólares, euros o tarjetas de crédito (el plástico o el papel dan menos juego que el latex).
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Aparte de que el mundo pueda ser violento pq no se folla,yo tengo un energumeno y solteron compañero en la mesa de al lado que necesita urgentemente un revolcón para sosegarse,es obvio que no se come una rosca y anda pitopausico por la oficina,arggggg ¡mes de diciembre y la ventana abierta de par en par pq el tipo tiene unos calores que bueeeeeeeeeno!
Publicar un comentario