Fue el año pasado cuando se me ocurrió la feliz idea de comprar una entrada para ir a ver "El fantasma de la ópera" (el musical), con la particularidad que siendo de provincias también tuve que incluir en el lote el viaje y una noche de hotel. Y dado que mi mujer tiene cierta afición por el arte "rarito" aprovechamos para dar una vuelta por ARCO.
Nadie puede negar que fue una celebración de "San Valetín" en toda regla, aderezado con el hecho de dar la sorpresa el día anterior al viaje.
Como en esto de los regalos y las sorpresas hay que ser originales (y si es posible ajustarse a un presupuesto) este año no iba a quedar bien ir a ver "Mamma mía", pero recuperé la idea de la noche de hotel, sobre todo porque nos había sobrado un Bancotel de las vacaciones de verano. De esta forma la única cuestión a resolver fue dónde consumir el Bancotel.
Por una serie de factores que no vienen al caso me decidí por Jerez de la Frontera. Y de nuevo triunfo por todo lo alto en el día de los enamorados.
No es gran cosa el secreto, sobre todo una vez contado, pero una noche de hotel en un destino cercano no sale muy caro y se queda muy bien.
Eso sí, desde el año pasado el 14 de febrero podrá caer donde le de la gana, pero el día de los enamorados siempre será sábado (sino no funciona el invento).
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1 comentario:
Se trata del detalle,de desear dar esa sorpresa y de tener ilusión por compartir algo especial...aunque sea en sabado,jeje,me alegro de que celebrarais el amor.Besitos
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