1.2.05

Perjudica seriamente la salud

Dado que uno no es fumador el hecho que prohiban fumar en todas partes no me afecta en exceso (como mucho en defecto, por aquello de los humos que no me van a rodear), pero me preguntaba yo si habrá adicciones más peligrosas para la salud propia y para la de los demás.

Estaba yo en esas elucubraciones cuando escucho a un compañero (un iluso cargo intermedio que se come toda la mierda porque cree que al final del plato va a encontrar oro) diciendo que a su suegra le ha dado un amago de infarto, que su mujer está hecho polvo y que él tiene una reunión con su jefe... ¡peligrosa adicción la del trabajo!

No sólo es adictivo sino que las empresas se convierten en sectas destructivas que persiguen alienar completamente a sus adeptos para que dediquen el máximo de su tiempo, haciéndoles cuestionar si ir a una reunión con su jefe idolatrado (por más que de boquilla lo cubran de gloria a las reuniones siempre van con el bote de vaselina convencidos que van a disfrutar) es más importante que su mujer envuelta en llantos o su hijo con un ataque de bronquitis en espera que alguien le lleve al hospital (caso verídico).


El gobierno debería hacer algo con esta peligrosa adicción, pues perjudica la salud del adicto y de la gente que le rodea.

Y si la cosa va de no tener que tragarse los malos humos de otros (entiéndase malos humos como la bilis de los jefes salpicando a los empleados) podrían prohibir trabajar en lugares públicos (las oficinas lo son).



PD: Fuckowski está haciendo efecto y el ácido me brota por todos los poros.

2 comentarios:

raul dijo...

jajajjaja. Un post muy interesante, si señor. Me he reido mucho XDD

Kaloni dijo...

Y además el Gobierno debería promulgar una Ley (con su consiguiente desarrollo normativo) en virtud de la cual, la cervecita de mediodía y una gambitas fueran gratuitas y a cargo de la Seguridad Social, que a todos nos gustan. Y establecer un derecho de los trabajadores por el que en vez de utilizar las anónimas encuestas ( que suelen ser más públicas que el chichi de la Bernarda)o el buzón de sugerencias, pudiesemos dar una colleja al jefecillo de turno, si es un capullo, así por lo menos sabríamos que ha llegado a buen puerto, a su verdadero destinatario, nuestra opinión.
Un saludo, es buenísimo este post.